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La Bancarización del Sector Inmobiliario Uruguayo complicará a los Argentinos
A partir del 2015 no se podrán comprar inmuebles en efectivo en el Uruguay, tampoco pagar alquileres y honorarios a administradores, siendo una restricción que se cree que complicaría a quienes planean invertir y no pretenden dejar rastros en el sistema. La ley de Inclusión Financiera que establece que el uso de efectivo estará restringido para el pago de operaciones que sean superiores a 5.000 dólares, la cual entra en vigencia a partir del 1° de mayo del 2015. Esto ha provocado que la compra de inmuebles y vehículos deban hacerse mediante el uso de instrumentos bancarios como transferencias, cheques, letras de cambio, etc.
Todo hace pensar que ésta restricción en cierta medida complicaría a los argentinos que tienen o que prevén hacer inversiones inmobiliarias en el Uruguay y que no quieren dejar rastros en el sistema. Los pagos de alquileres también están contemplados en la ley y que podrán hacerse en cuentas bancarias cuando superen los 9.396 pesos uruguayos, a partir del 1° de noviembre. Esto sería otro tema que podría repercutir en forma negativa hacia el inversor argentino. El pago deberá emitirse a través de medios de pago electrónicos emitidos por una institución de intermediación financiera a nombre del comprador, pero no hace mención en ningún momento que debe ser de Uruguay.
Además la ley prevé que pasen a formato electrónico otro tipo de transacciones que están bastante relacionadas con los argentinos como ser el cobro y pago de alquileres, los cuales deberán realizarse por medio de la acreditación en una cuenta abierta en una institución de intermediación financiera a nombre del arrendador según indica la norma. La identificación de la cuenta deberá constar de forma obligatoria en los contratos que se celebren a partir de la entrada en vigencia de la ley y en los contratos que ya estén en curso la parte arrendadora deberá comunicarle al deudor la cuenta en la cual deberán acreditarse los pagos correspondientes.
Diferentes opiniones sobre el desarrollo del mercado inmobiliario
El Banco Santander proyectó un descenso gradual en el mercado inmobiliario con respecto al precio del metro cuadrado en dólares para el 2015. Pero sin embargo, Wilder Ananikian, el operador uruguayo que preside la Confederación Inmobiliaria Latinoamericana (CILA), ha sostenido que existe una menor cantidad de transacciones pero que los precios no han bajado, todo lo contrario, siguen aumentando. En un encuentro desarrollado con integrantes de la Asociación de Inmobiliarias del Uruguay, el Banco Santander organizó una conferencia por parte de su asesora económica Marcela Bensión.
El evento se llevó a cabo como parte del convenio que existe entre Santander y la ADIU y, uno de sus motivos es el de conocer de primera mano las proyecciones económicas de la entidad financiera. En parte la desaceleración de la economía de China, las dificultades económicas por las que están atravesando Brasil, Argentina y otros socios comerciales importantes para el Uruguay como Venezuela y Rusia, sumado a que Europa aún no se ha recuperado del todo, tendrán un efecto negativo sobre la actividad económica en el Uruguay, afirmó la economista.
Opina que es esperable entonces que el mercado inmobiliario experimente un descenso gradual debido a un menor crecimiento del salario real, a un leve debilitamiento del mercado laboral y al incremento de la tasa de interés en Estados Unidos que se llevara a cabo, lo cual hará que las inversiones en ladrillos sean menos atractivas. Por otro lado, Ananikian en una entrevista afirmó que los precios no van a caer porque el costo país sigue creciendo y en la construcción los salarios crecen permanentemente. "Si el costo del metro cuadrado de las unidades a estrenar sube, también sube el precio de los inmuebles usados", dijo el presidente de la CILA en representación de la Cámara Inmobiliaria del Uruguay (CIU).